La decisión de realizar compras en una tienda online o compras en una tienda física es cada vez más difícil.
El comercio electrónico poco a poco asienta sus cimientos en España. Aunque todavía el volumen de ventas se encuentra lejos del de otros países europeos, como es el caso de Alemania, la tendencia de este mercado es de claro crecimiento.
Esta tendencia no ha hecho más que aumentar desde la crisis del COVID-19.
Según el gráfico de https://es.statista.com/grafico/8705/comprar-online-depende-del-tipo-de-producto/ podríamos decir que los españoles prefieren comprar online u offline en 2017.
¿Quieres saber el porqué de esas cifras? Te contamos los motivos.
Costes más reducidos
Los costes de abrir una tienda online son mucho más reducidos que si tuvieses que abrir un negocio local.
Con una tienda física tienes que asumir la inversión del local (Alquiler o compra), la licencia, el mobiliario, decoración, gastos de luz...
En cambio, abrir y gestionar un eCommerce es mucho más simple
No hay horarios
En el comercio online tu negocio está funcionando 365 días al año, 24 horas al día.
Puedes vender al mundo entero
Una de las principales ventajas de tener un negocio en Internet es que rompes las barreras de lo físico. Desde Internet puedes llegar a todo el mundo.
Comodidad para los compradores
Los compradores pueden acceder cómodamente desde su casa, desde cualquier lugar del mundo, aumentando de manera considerable, el número de clientes potenciales.
Posibilidad de crecimiento más rápido
Al tener posibilidades casi infinitas en el mundo online, el crecimiento del negocio se puede producir de forma más rápida que si lo comparamos con las opciones de crecimiento que tenemos en una tienda física.
Nuevas opciones de venta
El Dropshipping es una opción atractiva tanto para el que empieza con un negocio nuevo como para el que ya tiene uno establecido. Si tienes una tienda, te permite abrir nuevas líneas de productos y diversificar tus vías de ingresos sin tener que realizar una gran inversión.
Ventajas de las tiendas físicas frente a los e-commerce
Las tiendas físicas siguen destacando en varios puntos a los que las tiendas virtuales todavía no han podido llegar.
Los clientes desean ver el producto
Todavía hay personas que necesitan poder tocar, ver y sentir el producto antes de comprarlo. Sobre todo en el caso de sectores como la moda o la cosmética, donde la experiencia sensorial es un punto muy relevante.
Fidelización del cliente
El poder atender a los clientes en persona favorece su fidelización.
Transacciones más seguras
Cada vez son menos, pero todavía quedan personas a los que les da reparo meter sus datos bancarios en una web.
Para estos clientes es más cómodo comprar en su tienda de toda la vida, donde saben que nadie les va a robar sus datos.
Sin gastos de envío ni esperas
Al comprar en una tienda física compras el producto y te lo llevas al momento, además no tienes gastos de envío.
Devoluciones más cómodas
¿Qué pasa si un producto que has comprado en una tienda física no te convence?
Vuelves a esa tienda y te tramitan la devolución al lisntante.
¿Y tú con cual te quedas?
Ahora que conoces todas las diferencias entre las tiendas online y las tiendas físicas, ¿con cuál te quedas? ¿Te decantas por un negocio local o por un e-commerce?